sábado, 2 de mayo de 2020

#YoMeQuedoEnCasa - 51


Hoy ha sido el día en que nos han abierto las puertas de la casa para salir a correr, surfear, montar en bici o simplemente caminar. Nos han permitido ser, ya no somos solo quien pasea al perro, va a la compra, se encamina al trabajo o saca a los niños. Desde hoy podemos salir sin buscar una excusa para encontrarnos con nuestros espacios, pero eso sí de 6 a 10 de la mañana y de 8 de la tarde a 11 de la noche, y sin alejarnos de casa y guardando las distancias, nunca en fila india, vamos como los dos chavalotes de la foto. Esto para las ciudades o pueblos con más de cinco mil habitantes, en los pueblos que tienen menos habitantes se puede salir a cualquier hora. Seguro que muchos envidian su suerte con magníficos pinares o montañas a un metro de casa y espléndidas playas en las que caminar casi en soledad.

Esta tarde, mientras tomaba café, hablaban en la tele de que hoy era un día propenso para que los infieles actuasen. Venían a decir que si tu pareja tenía prisa por ponerse el pantalón corto y las zapatillas andaras con buen ojo. Enseguida no he podido dejar de reparar en las zonas de cruising que habrán sido un buen lugar de esparcimiento, ya son muchos días sin darle alegrías al cuerpo. Si es vuestra opción, no olvidéis los guantes, la mascarilla y mantener la distancia de seguridad que el deseo nos puede ocasionar malas consecuencias. ¿Qué hacer entonces sin tocarse? Imaginación habrá,. Alguno se excitará como voyeur, otros compartirán pajeo, los guantes pueden servir para acariciar la próstata, la mascarilla puede darle más morbo al sexo oral y espero que los menos lo hagan sin control que lo prohibido siempre mola.

Os quedéis en casa como yo o salgáis a pillar cacho, cuidaros, no solo por vosotros, también por vuestras familias.





------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Las fotografías proceden de Internet, y no se cita al autor por no indicarse en el lugar de origen su autoría y procedencia. En caso de incumplimiento involuntario de algún derecho se retirará inmediatamente










4 comentarios:

  1. Buenos días Germán, en este segundo día de paseo controlado, a distancia y acotado en el horario.

    Yo, como tú, decido quedarme en casa, mas aún cuando hay días que estoy, por mi trabajo, fuera de ella hasta 10 ó doce horas seguidas.
    Pero también en casa porque viendo lo ocurrido en tu ciudad con los niños la pasada semana, y en la mía ayer, no parece que hayamos tomado conciencia de la gravedad sanitaria que envuelve a todo el mundo. El peligro-no-ha-pasado. Recordémoslo.

    Se necesita darle alegría al cuerpo, claro que sí. La necesidad apremia. Yo mismo siento la distancia y la falta de contacto con las dos grandes personas de mi vida: con Olga, con Antonio.
    Soy tremendamente tímido para contar mi vida más privada, pero creo que aquí encuentro la confianza y complicidad necesaria para poder hacerlo. Por esa timidez yo no conozco personalmente el cruising. El morbo, la urgencia, el deseo y el gusto parecen ser las bases de este modo de relación sexual. Pero cuidado con ella, siempre sexo seguro, con protección, que luego vienen las consecuencias no deseadas. Tú lo explicas muy bien en el texto de hoy.

    Seguimos en contacto, Germán. También con nuestros compañeros de viaje. Pronto tomaré algo mas de aire y para empezar a decirte, a deciros, algo mas sobre mi, si me lo permites, con sus luces y sus sombras, con sus blancos y negros.
    Un gran abrazo a todos. Henri/Enrique.

    ResponderEliminar
  2. Todos tenemos luces y sombras, es la vida sin más. Esta es tu casa, así que puedes contar todo lo que quieras. Seguro que tus experiencias de vida nos ayudan a trazar el camino.

    Mi relación con el cruising es nula, si exceptuamos que todo comenzó en una playa. Nunca imagine lo que iba a pasar allí y la marejada que trajo a mi vida. Puede que sea morboso, pero esa inmediatez-rapidez no me atrae lo más minimo.

    Un abrazo amigo

    ResponderEliminar
  3. Las prisas para el sexo por el sexo sin más, no van conmigo, tampoco me atrae.
    Gracias por ofrecerme tu casa para dar a conocer, a tí y nuestros compañeros, las vicisitudes de mi vida, brillantes y apagadas, bonitas o no: como tú dices, la vida sin mas.
    Tu siguiente texto es gratamente bonito, luminoso y esperanzado: la mariposa, brazos abiertos, el mar... Precioso, de verdad. Gracias. Enrique.

    ResponderEliminar

Gracias por compartir este viaje

SOLO PARA TUS OJOS

Para que nadie se quede sin vistas completas, y ante el comentario de Tony, estos momentos van por vosotros y en especial por el amigo itali...