sábado, 28 de marzo de 2020

#YoMeQuedoEnCasa -16


Soy de ducha diaria. La bañera es un adorno más del habitáculo que la cobija, pero hoy apetecía un baño caliente con sales minerales sin aromas. Es un buen momento para limpiar nuestro cuerpo de todo aquello que nos limita. Sumergirse en el agua tan desnudo como el primer día, mojando la piel sin esquinas. Me zambullo por unos segundos para llenarme completamente de agua. Al salir mi nariz y mi boca respiran un nuevo momento. Liberado del ayer, habito un cuerpo sin soledades.

Una sonrisa cómplice recorre mi rostro recordando una tarde de agua en la que el esplendor me rebasó en belleza. Era otra agua salada. Abierta en profundidades de mar y playa. Dos cuerpos sumergidos en virilidades concentradas. El agua se entregó a nosotros y nosotros nos dejamos abrazar por sus transparentes manos. Los dedos recorrían los cuerpos excitando el momento. Los besos encendieron como si fueran chispas el brillo del verano. Todo se hizo uno, hasta nuestras almas se fusionaron derramadas en el agua.


------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Las fotografías proceden de Internet, y no se cita al autor por no indicarse en el lugar de origen su autoría y procedencia. En caso de incumplimiento involuntario de algún derecho se retirará inmediatamente

6 comentarios:

  1. Buenas noches Germán. Sí, así si. Enhorabuena. Llevas dos días después del bajón sufrido y que, afortunadamente, fué pasajero.
    Qué bonito recuerdo el de hoy, del que nos haces partícipes, y que nos transporta a unos momentos mágicos, insospechados, llenos de belleza, en el que la unión de dos hombres que se atraen mútuamente hacen que esos momentos se guarden para siempre en la memoria, imposibles de olvidar de tan bellos como fueron.
    Es una delicia leerte, imaginarte escribiendo al respecto, imaginarme esos maravillosos momentos. Me quedo sin palabras, y - creételo!- se me escapan unas lágrimas. No sé porqué, pero ahí están resbalando por mis mejillas. Un fuerte abrazo Germán. Henri.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Henri. No sé que decirte ante unas palabras tan hermosas y gratificantes. Las emociones nos hacen ser grandes, y esas lágrimas escapadas son una clara señal de que tú lo eres. Gracias por todo, por estar, por compartir tus pensamientos, por ser. Un abrazo.

      Eliminar
  2. Hola Germán, hola Henri, no me quedan dudas, que gran privilegio haberlos conocido, ambos son grandes hombres, de esos que son capaces de combinar en forma armónica los sentimientos (por delante) y las realidades de la vida, buenas y malas, enfrentándolas para seguir adelante sin perder la esperanza ni la capacidad de pensar, soñar, dar espacio al placer y a los momentos inolvidables como los que Germán nos recuerda en esta entrada, de la forma que él sabe hacerlo, hermosa, pero a la vez con una carga de erotismo y realidad que nos traslada a su mundo, hace que podamos sentir que somos ese otro que junto a él se sumergieron abrazados en las aguas del mar que tanto nos permite sentir, siento como mis manos recorren ese otro cuerpo excitado, llegado hasta los rincones más sublimes del mismo y sintiendo sus manos recorriéndome, uff, gracias Germán, gracias Henri por su amistad

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias amigo, me siento abrumado por vuestras palabras, pero también reconfortado y con ganas de seguir en el viaje. Un abrazo.

      Eliminar
  3. Eso digo yo Luis Mario: ufff. Qué delicia, qué placer en todos los sentidos, leer esas hermosísimas reflexiones y prensamientos repletos de elegancia, dulzura y sí, de erotismo tambien. Reflexiones de Germán y reflexiones tuyas. Efectivamente, es un gran privilegio habernos encontrado y darnos a conocer mútuamente los tres a través de la palabra, la sinceridad, transparencia, la bondad y amistad que se reflejan cuando cada noche me acerco a vosotros, os visito en vuestros pensamientos, me decís lo que estoy viendo con vuestras palabras escritas, y después de inevitablemente emocionarme, me entregais una paz que es impagable. Apago la luz, cierro los ojos, pienso en vosotros, en lo especiales que sois para mí y en qué suerte he tenido de conoceros, y así con una sonrisa, me dormiré plácidamente.
    Mi gratitud infinita a tí Germán, a tí Luis Mario por haberme acogido y aceptado para compartir nuestros momentos, actuales, pasados, públicos o privados, o íntimos. A los dos, gracias. Henri/ Enrique.

    ResponderEliminar
  4. Palabras muy sentidas y llenas de emoción. Descansa tranquilo, estamos a tu lado en estos momentos tan inciertos. Aquí nadie está solo, y menos tú que compartes con todos los viajeros tus sensaciones. Cuídate en estos tiempos de la covid. Un abrazo.

    ResponderEliminar

Gracias por compartir este viaje

SOLO PARA TUS OJOS

Para que nadie se quede sin vistas completas, y ante el comentario de Tony, estos momentos van por vosotros y en especial por el amigo itali...