lunes, 12 de abril de 2021

Segundo lunes de Pascua en Valencia


Esta tarde la ciudad habitaba tibia por el sol, festiva en las calles, las mesas de las terrazas se llenaban de gentes que expuestos como lagartos captaban toda su energía. Con tan buen día apetecía acercarse hasta el mar. Necesitaba sentirle. 

Cerca de sus dunas presentí que el aire soplaba con fuerza hasta formar blancas crestas en sus olas. Solo unos pocos se acercaban hollando la arena con sus duras pisadas. Entre ellos yo, que le susurraba la historia de ninguno. 

Como si no hubiese pasado el tiempo, me miraba, alargando sus dedos de agua para acariciar mis botas infamadas de arena. Medusas y conchas llegaban arrastradas por su fuerza llenando de cadáveres los inertes granos de la playa. 

De pie, sorbiendo el gélido aire, salpicado por las minúsculas gotas de su salada agua me sentí renovado. Sabe que mi camino es más firme, que mi viaje más tranquilo, que vivo nuevos tiempos en los que me siento yo. 

Esta tarde he estado aquí con mi amigo el mar. Siempre en mí y yo con él.



2 comentarios:

  1. Buenas noches Germán.
    Tú acercándote al mar, yo en mi ciudad del interior, he pasado esta mañana, caminando, junto a la verja de la Biblioteca Nacional. Cruzo la calle y, sin pararme, el precioso Café El Espejo está completo en su terraza, con la pandemia todavía dominante. Poco menos de un año atrás, la misma terraza estaba vacía, con no mas de cuatro o cinco clientes disfrutando de interesantísimas conversaciones, de las cuales, en una de ellas yo participaba. Ya estábamos inmersos en la pesadilla.
    Me alegro de escribirte después de un prolongado espacio en blanco, y de volver a conectar contigo y con todos loz compañeros de este viaje.
    Un abrazo, Germán, compañeros.
    Enrique.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola amigo, que bueno tener noticias tuyas. Me alegro que estés de nuevo con fuerzas renovadas. El lugar que describes de Madrid es un espacio idílico para mi, cuantas horas he pasado en esa biblioteca investigando y cuantos cafés me he tomado en los descansos donde aludes.

      Cuídate mucho y no dejes que los espacios en blanco inunden tu vida, yo lucho por lo mismo. Esta pandemia esta creando demasiados y hay que combatirlos. Un abrazo.

      Eliminar

Gracias por compartir este viaje

SOLO PARA TUS OJOS

Para que nadie se quede sin vistas completas, y ante el comentario de Tony, estos momentos van por vosotros y en especial por el amigo itali...