martes, 22 de octubre de 2019

Atrapado en la misma piel



Quiero compartir con vosotros sentimientos que viven en mi desde hace unos meses y que no sé exactamente como definir, o tal vez me de miedo hacerlo.

Siento que habito la misma piel, el mismo cuerpo, que las manos son las de siempre, al igual que las piernas que me mueven, hasta los ojos son los mismos, aunque se vayan apagando en ilusiones cada vez más lejanas.

Me siento atrapado en una vida que grita en busca de libertad, que quisiera romper con todo para sentir la fugaz belleza de lo que le rodea.  Quiero caminar hacia adelante y no lo hago, quiero recorrer otro cuerpo y no lo hago, quiero ser feliz y no lo hago. En definitiva, quiero ser y, no soy.

Es otra vez la misma historia, cansina y abotargada. Hastía hasta lo más profundo depender de lo que digan los demás, depender de otros para el sustento diario, no tener libertad de caminar según tus pasos y hacerlo con los de los demás.

Esta vez no quiero que cuando el otoño haya pasado no haya pasado nada. Quiero amar a mi esposa en libertad, quiero amar al hombre en libertad, quiero tener un trabajo que me de libertad, quiero ser libre para tener libertad de elegir aquello que me haga más feliz.


Atrapado en mi misma piel, esta tarde fluyo en trapos olvidados, sucias corrientes y recuentos no contables. Es como si el rostro se diluyera en nada, el cuerpo se mostrase desnudo entre fondos de níveo blanco y el pensamiento fuese aventurándose en desgarradoras tristezas.

El agua de mi río se pierde en el mar de mis interioridades, no quiere fluir al estuario de la vida.


------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Las fotografías proceden de Internet, y no se cita al autor por no indicarse en el lugar de origen su autoría y procedencia. En caso de incumplimiento involuntario de algún derecho se retirará inmediatamente










10 comentarios:

  1. Querido Germán,
    Creo que entiendo perfectamente a lo que te refieres.
    Durante mucho tiempo yo estuve igual que tú, atrapado entre la mujer que amaba (que yo quise amar) y el deseo que me producían los hombres (algo que no quería pero que estaba ahí y no podía evitar, por mucho que lo intenté durante mucho tiempo). Y esta dicotomía me llevó a plantearme muchas, muchas veces, qué debía hacer, porque compaginar esas dos vertientes de mi vida no era posible. Debía elegir entre mi familia y yo mismo. Y muchas, muchas veces, elegí a mi familia. Pero eso no me hacía verdaderamente feliz, porque mi deseo por los hombres seguía ahí. A veces podía controlarlo (con mayor o menor dificultad) pero otras veces ese deseo me controlaba a mí, y entonces volvía a sentirme prisionero, atrapado entre lo que quiero, lo que debo y lo que siento.
    Esta situación se me hizo insostenible porque, por mucho que quieras proteger a la familia llega un momento en que te afecta tanto esta doble vida que eres incapaz de ocultarla más, y aunque no lo declares abiertamente, quien te conoce, quien te tiene cerca, empieza a notar en ti que algo ocurre, que algo no es como era antes, que algo está pasando. Y aunque yo trataba de negarlo, y lo negué durante mucho, mucho tiempo, llega un momento en el que ya no puedes más y explotas. Y entonces eliges, TE eliges, definitivamente. Y a partir de ahí empiezas a vivir.
    Pero toda elección implica un descarte, y ahora toca vivir con las consecuencias de ese descarte. Durante muchos, muchos años, me descartaba a mí, y el tiempo me demostró que no podía vivir así. Ahora que me he elegido, que he descartado a mi familia (y como duele decir eso!) me siento tranquilo, me siento feliz. Sé que he hecho mucho daño a gente que amo (mis hijos) y a gente que he amado mucho (mi exesposa) y sé que alguien podría considerar que he actuado de manera totalmente egoista. Lo siento, no quise herir a nadie intencionadamente. Durante mucho tiempo, muchos años, muchas veces, no lo fui: elegía a mi familia y me negaba a mi mismo.
    Que me llamen egoista ahora, que me juzgue quien no ha tenido que andar con mis zapatos; porque yo, ahora, me sé libre.
    Un fuerte abrazo, Germán, para ti y para todos los hermanos, los viajeros de este camino que transitamos en soledad.
    Hotdardo 🎯

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Hotdardo. Yo si te comprendo, al igual que me comprendes tu a mi. Cada uno con nuestras circunstancias, pero con similares situaciones. Para mi eres un valiente, un hombre que ha elegido su autentica libertad, dejando atrás la opresión del sinsentido.

      En mi caso, por el momento, mi atrevimiento no va más allá de un masaje o el morbo de una mirada, pero hasta para eso encuentro limitaciones ahora. Los deseos permanecen aún ocultos luchando por aflorar.

      No sabes cuanto aprecio tu sinceridad y valentía, pero sobre todo que seas feliz. Un gran abrazo.

      Eliminar
  2. Entiendo a hotdardo. Pero mi pregunta es se apagan los deseos por estar con un hombre. Cuando llevas 10 años con el mismo hombre ¿No apatece cambiar?. Desear significa querer lo que no se tiene. Para mi, que me gustan los hombres al igual que mi mujer no es una barrera para mí día a día. Quizás porque me he aceptado y no he negado ese deseo como hotdardo. No vivo con ese malestar de porque me gustan los hombres. Lo acepto, lo disfruto cuando veo un hombre guapo pero me debo a un pacto de fidelidad que tengo con mi esposa. Ella sabe que me gustan los tios. No lo hablamos a diario porque sé que le incomoda pero se lo dije en su día. En fin cada persona un mundo y cada relación también. Nada vale más que nada. Valoro la decisión de Hotdardo, porque vivir como vivía no era sano para él y al final solo tenemos una vida y cada uno tiene saber cómo vivirla. Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola amigo, al igual que entiendo a Hotdardo, también te entiendo a ti, porque cada uno tenemos nuestras circunstancias y todas son validas si no nos causan infelicidad. De ahí que no me gusten las etiquetas ni el juzgar a nadie.

      Valoro mucho tus palabras, gracias por compartirlas. Un abrazo grande.

      Eliminar
  3. Yo considero que cada historia es diferente y cada cabeza es un mundo... Yo vivo con mi esposa e hijo, los amo y disfruto tenerlos en mi vida.. No obstante tengo un amigo, igual casado, con hijos también, que disfruta por igual a su familia, amando a su mujer.. No obstante nos hemos atrevido a ser amigos íntimos "amantes" ocasionales, y nos disfrutamos el uno a otro, en discreción, privacidad, exclusividad y seguridad, nos hicimos pruebas antes de tener sexo y estamos en contacto por celular constantemente hasta haber oportunidad de vernos, no importa no sea seguido, el encontrarnos y hacer el amor, nos excita y complace, satisfaciendo esa necesidad sexual de un hombre, y un amigo, el besarlo y abrazarlo, y sentir la similitud de vivencias es una fuerte sensación, fraternal. Desde México, un abrazo a todos! No están solos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola amigo mexicano, gracias por estar aquí, acompañándome en este viaje y compartir tu experiencia, sé que ese es el camino, estoy en ello.

      Un abrazo lleno de vida.

      Eliminar
  4. German, atrevete a vivirlo, eres hermoso ser humano, que nos compartes hace mucho tus vivencias, busca ese amigo especial y disfrute de en privado, no es una mujer, no cambia nada lo que tienes con tu esposa, los hombres somos diferentes, pensamos, actuamos y hacemos el amor diferente. Solo busca alguien especial, para tener una amistad segura y discreta. Si decides compartirlo o no con tu esposa es ti decisión. Nosotros, mi amigo y yo nos disfrutamos en privado, sin perturbar a nadie, como cuando te masturbas o ver porno de hombres en privado, es algo personal y no necesariamente debes compartir. Un abrazo german, majo, vive amigo, mi humilde consejo, saludos a todos.

    ResponderEliminar
  5. Hola, hace un buen tiempo pensaba que lo que me estaba ocurriendo no era normal, no lograba entenderlo me gustan las mujeres mi mujer, el sexo con ella lo disfrute intensamente, amo a mi familia, pero ... sentía que deseaba otros placeres, los identificaba en otro hombre. Luego, cuando me decidí y tuve relaciones con un hombre, supe que es diferente, pero que no anula el gusto por las mujeres, nunca ha sido un impedimento para seguir amando y disfrutando a mi mujer, teniendo de forma privada, discreta, oculta a los demás encuentros con amigos, cuando se dan todas las condiciones. Ahora, gracias a esta y otras páginas he visto que lo que me ocurre es más frecuente de lo que pensaba y me alegra mucho poder compartir por esta vía nuestras experiencias, vivencias, deseos secretos, con los cuales no haceos daño a nadie, si se hace bien

    ResponderEliminar
  6. Ahora me dirijo a ti amigo Germán, amigo que logró el milagro de que pudiera entender lo que me ocurría, que me ha permitido ver que lo que siento no es exclusivo de mi, que la bisexualidad es real, existe, que no es como muchos dicen ser un "gay" que no quiere reconocerlo, tus publicaciones, los comentarios que provocan son para mi de una ayuda extraordinaria, y me provocan un placer infinito, He hecho varios comentarios, algunos anónimos, he destacado y te insisto que nunca había encontrado tanta hermosura en la forma de describir lo que se puede sentir e incluso hacer entre dos hombres, no hay una sola vulgaridad en tu lenguaje, es muy bello lo que escribes, eso sólo es posible que lo haga una buena persona, así lo siento y por eso, aunque sé que todos pasamos por momentos y estados de ánimo buenos y malos, me preocupa que te sientas mal. Siempre tus publicaciones transmitían optimismo, dan razones para entender lo que nos puede ocurrir al desear a . otro hombre sin dejar de amar a nuestra esposa, a nuestra familia, nos has ayudado mucho, gracias. Ojalá ahora podamos ayudarte tanto como tú a nosotros a que este otoño mejore para ti y llegue un invierno lleno de bienestar y alegría. Particularmente coincido con uno de los amigos que escriben que pone sobre la mesa que va a ocurrir cuando pase el tiempo y entonces ya no encuentres en un amigo lo que ahora quisieras, la libertad en este mundo es relativa y debemos saber manejarla, en verdad, nunca vamos a ser realmente libres, el secreto está en saber manejar momentos de libertad. Hasta aquí tú pareces ser un hombre correcto, amante de tu mujer, de tu familia, cambiarias eso por la "libertad" de estar con el hombre que quieres, no es posible hacerlo con una libertad relativa, con discreción, disfrutando el placer de la complicidad, sintiendo el placer que produce pensar, planear, imaginar el próximo encuentro con él, recordar uno anterior, soñar despierto en esos momentos de soledad que disfrutas en la playa, en tu casa, en... es lo que pienso amigo, ... pero finalmente lo que más quiero es que seas feliz, pero no sólo en este otoño-invierno, sino para todo el resto de tu vida. Es difícil, pero hay que pensar que el tiempo también pasa para uno, y deja sus huellas y lo que hoy es hermoso, se puede ir perdiendo. Espero puedas comprenderme, quizás algunas cosas no sean del todo claras en mi expresión, no soy bueno escribiendo como tú. Te doy un abrazo de amistad.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola amigo.

      No sabes cuanto agradezco tus palabras, son muy importantes para mí. Cada texto que subo es fruto de mi estado de ánimo, de cómo me encuentro en el momento en que me siento ante el ordenador. Imagino que es algo que nos ocurre a todos los que hemos emprendido este viaje.

      En estos momentos, a pesar de este escrito, vivo un buen momento en mi vida. Me siento bien conmigo mismo.

      Creo que tus abiertas y acertadas palabras merecen una reflexión por mi parte con una entrada propia.

      Gracias por estar ahí, por viajar conmigo por este camino lleno de sentir.

      Un abrazo amigo.

      Eliminar

Gracias por compartir este viaje

SOLO PARA TUS OJOS

Para que nadie se quede sin vistas completas, y ante el comentario de Tony, estos momentos van por vosotros y en especial por el amigo itali...